Dwyane Wade (Heats) se prepara para lanzar ante la marcación de Troy Murphy ( Nets) |
Los Nets se lo imaginaban. El equipo de Nueva Jersey sabía que Miami saldría el sábado a la cancha con toda la furia y la pasión posibles para borrar la mala imagen de la derrota sufrida un fecha antes en Nueva Orleans.
Y efectivamente, el Heat quebró una resistencia inicial de los Nets para derrotarlos 101-89 con destaque para Dwyane Wade y LeBron James, quienes agregaron un toque circense con varias jugadas espectaculares.
"En Nueva Orleans no salimos enfocados desde el principio y ahora no queríamos que eso sucediera'', expresó Wade. "Todavía estamos aprendiendo a jugar como equipo, pero hay cosas que son inadmisibles. La energía tiene que estar presente minuto a minuto''.
Y para variar, hasta Chris Bosh despertó de su letargo y se unió a sus dos estelares compañeros en una ofensiva que por primera vez en la temporada tuvo a sus tres mejores jugadores por encima de los 20 puntos.
Wade, que ha sido lo mejor hasta el momento del Heat, sumó 29 unidades y 10 rebotes para convertirse en el cuarto mejor jugador de la franquicia con dobles-dobles, superando a Tim Hardaway.
James finalizó con 23 puntos y nueve asistencias, y Bosh, a quien le ha costado trabajo integrarse del todo a su nuevo equipo, colaboró con 21 puntos y cinco rebotes. Entre los tres se ayudaron para marcar canastas de lujo.
"Se trata de jugar con fuerza y de divertirnos a la vez'', afirmó Wade, quien le hizo varios pases excepcionales a James y viceversa. "Nos ayudamos y nos recompensamos unos a los otros''.
Miami había vencido por una diferencia de 23 cartones en Nueva Jersey en su segundo choque de campaña, y esta vez lo hizo por 12, pero ese dígito no reflejó la realidad de lo sucedido, pues el Heat terminó con sus jugadores de segunda línea.
Para el final, las estrellas estaban de descanso.
El coach de los Nets, Avery Johnson hizo todo lo que pudo para mantener a sus muchachos en la acción, e incluso los visitantes llegaron a imponerse en el primer cuarto del encuentro, pero la ilusión duró poco.
A fines del segundo período Wade se echó al equipo al hombro para poner a Miami delante y dejarle preparado el camino a James, quien destrozó a los Nets en el tercer parcial con un ataque incesante.
Cuando Miami inició el último tramo del desafío, la ventaja sobre los Nets coqueteaba con los 20 puntos y Johnson, quien dirigió a los Mavericks en la inolvidable Final de la NBA ganada por el Heat en la temporada 2005-06, no tuvo otro remedio que contemplar sentado en el banco cómo los Nets encajaban su tercera derrota consecutiva.
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