LAS VEGAS -- El puertorriqueño Juan Manuel López, campeón mundial pluma de la OMB, defendió con éxito el sábado su título frente al mexicano Rafael Márquez, al vencerlo por nocaut técnico tras el octavo asalto en el MGM Grand Garden Arena.
Márquez (39-6, 35 nocauts), no pudo salir al cuadrilátero para el noveno asalto tras perder de manera extraoficial siete de los ocho anteriores.
López (29-0, 26 KOs) logró así la segunda defensa exitosa del título que ganó en enero. Además, ha sido campeón del peso gallo de la FIB y supergallo del CMB.
Márquez, que ya había tenido que postergar el cruce una vez, dijo que quería pelear a pesar de una lesión en el hombro derecho que sufrió antes del combate. En el tercer asalto, volvió a lastimarse en ese hombro cuando López le soltó dos ráfagas de golpes.
El mexicano logró varios impactos fuertes en el cuarto asalto, el único que ganó. López también sufrió el descuento de un punto por sostener al rival y pegarle detrás de la cabeza.
Del quinto al octavo asaltos, el boricua persiguió a su rival la mayor parte del tiempo y mostró un dominio más pronunciado en el séptimo, en que Márquez no pudo responder a varios de sus potentes golpes.
Al final del octavo round, López llevó al mexicano a una esquina y le asestó una nueva ráfaga de golpes. Márquez se retiró desde su rincón después de ese asalto por la lesión en el hombro.
El árbitro "me preguntó: '¿Vamos a tener que terminar esto? ¿Quieres seguir peleando?'", dijo Márquez. "(Le dije) 'No puedo seguir, no puedo seguir'. Si no me hubiera lastimado el hombro habría sido una de las grandes peleas de todos los tiempos. Me gustaría una revancha".
López aseguró que el mexicano "es el mejor peleador al que me enfrenté. Soy el número uno, él es el número dos. Me estaba lastimando".
"Somos atletas. No quería lastimarlo más de lo necesario", agregó. "Los últimos dos asaltos sentí que lo estaba lastimando. Por eso le pedí al juez que parara la pelea. No quería que nadie saliera lastimado".
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